Que me perdone si me lee. Que me odie como lo hizo cuando dije adiós sin explicación alguna. Que me ignore como lo hace ahora cuando nos cruzamos en la calle. Pero que nunca me quite la sonrisa de los recuerdos, esos que encontré en textos como este. Que aunque no haya funcionado en aquel entonces no signifique que las palabras deban morir.


"con la resaca encima te respondo tu mensaje que me gustó tanto ya te lo dije por los paréntesis y el juicio en los signos de puntuación pero yo en cambio ahora no quiero más ni de comas ni de puntos ni de dos puntos que como hemos coincidido a veces son tan arbitrarios y contrarían el sentido común en fin no me desvío más del tema porque el tema eres tú señorita desbarajustada que me gustas tanto que ya te quiero así como dices que me quieres tú a mí con tus dolores de hombro y tus diminutivos y tu inglés fluido y tu cuerpo ése sí del putas putas y tu cabeza y lo que guardas en ella y tu voz y tu oscura ingenuidad toda todita te me metiste y te quedaste cosa que me agrada te retribuyo pues ese gesto tan bello inteligente y cómico de mandarme un mensaje con el único propósito de ratificar tu aprecio hacia este hombre que necesitaba salirse un tanto de sí mismo para mirar el espectáculo del mundo donde estás tú y el resto te digo entonces que me alegra haberme tropezado contigo y que me estés iluminando el alma un beso".

 Gracias por dibujarme una sonrisa en un día oscuro, así no sepas que lo haces.